sábado, 9 de junio de 2007

Soledad

Mientras me encerraba en mi piel, y evitaba mostrar mi rostro a quienes parecían verme a través de una vidriera, no noté, casi ni sentí lo sola que estaba. Me refugié en mi memoria dolorosa, reviví una y cien veces los diálogos, las lágrimas, los temores, clamando por un alivio que vendría de seres ajenos e inesperados.

Esta mañana abrí los ojos, moví mis manos, sentí el aire resbalar sobre mi piel. Pensé por un momento que estaba viva, que podía caminar tres pasos sin caer, que nuevamente era la dueña de mi destino, y que por sólo desearlo se abrirían ante mi paso las sombras y las tinieblas.

El mundo sigue su curso, y no espera a quienes dan vueltas sobre su eje. Estiro mis brazos, y sólo aferro el silencio. Alzo la voz buscando respuestas, pero un eterno rechazo ilumina de golpe el vacío que me envuelve.

Y al igual que cada noche, enfrento en el espejo los círculos oscuros que delinean mi mirada, la faz cansada que suplica una caricia, los cabellos alborotados, la sonrisa helada. Sin testigos, sin oídos, sin palabras de consuelo.

Pero esta vez, sintiendo en mi carne la crudeza de una soledad sin oportunidades.

Amanda Cabot.
Junio 9 de 2007.
Respiro, simulo, sonrío. Pero siento en mi pecho el dolor, como un viejo conocido, recuperando las horas perdidas.

1 comentario:

Lilian Flores Guerra dijo...

Hace unos días, en mi afán de protagonismo (jeje, no, mentira), envié este texto al grupo de escritores. Patricia (BInah) me respondió lo siguiente:

"Madelaine, heme acá, una vez más leyendote, escribir es una buena terapia
para sacar esas "sensaciones de tristeza", pero sabes que?, todo pasa, el
universo se mueve y nosotros con él, en cuanto a ese silencio que buscas,
que necesitas, llegará, a veces cuando buscamos con desesperación no podemos
ver con claridad.

Un abrazo,

Patricia Gómez (mi nick, Binah)
mi pagina http://patriciagomez.wordpress.com/".

Recién hoy pude verlo, y le dije:

BInah,



Perdona la demora en contestar. El mundo hizo otro de sus giros locos, y aquí estoy, recién poniéndome al día, leyendo y tratando de volver a la normalidad.



Gracias por tus palabras, por lo que encierran, por la esperanza que transmiten, y por la gentileza de dedicar unas líneas a lo que humildemente trato de expresar.



Cariños, y espero leerte pronto.



Amanda".